Caracas, 31 jul (Prensa Latina) Venezuela avanza hoy en el restablecimiento de la paz, tranquilidad y normalidad en el país después del pretendido golpe de Estado articulado por la extrema derecha nacional e internacional, en fusión con Estados Unidos y el narcotráfico colombiano. PRENSA LATINA Tras las intensas horas vividas de violencia y terrorismo el pasado lunes en Caracas y en varios estados del país y, en menor medida el martes, el presidente Nicolás Maduro adoptó un conjunto de decisiones encaminadas a la restitución paulatina de la tranquilidad, la cual se vio alterada por sectores extremistas. Los resultados electorales divulgados por el Consejo Nacional Electoral que dieron el triunfo a Maduro con el 51,20 por ciento y el 44,4 a Edmundo González de la Plataforma Unitaria Democrática, pusieron al desnudo los planes que se venían denunciando en las últimas semanas. Tal y como declararon las autoridades ocurrió: la extrema derecha cantó fraude para deslegitimar los resultados comiciales y la maquinaria de guerra planificada lanzó todos sus dardos para promover un golpe de Estado porque el objetivo no es otro que sacar a Maduro del poder. El dignatario electo lo denominó “plan de desestabilización masiva” organizado por Estados Unidos, la derecha internacional extremista y el narcotráfico colombiano, indicó. “Estamos enfrentando una arremetida mundial del imperialismo estadounidense, Elon Musk, de la derecha internacional extremista y del narcotráfico colombiano”, subrayó el mandatario, Denunció en ese sentido que los organizadores metieron millones de dólares y drogas para financiar las operaciones de desestabilización, para las que utilizaron grupos de emigrantes que se entrenaron en el exterior y regresaron en los aviones provenientes de Estados Unidos. Utilizaron mucho billete para establecer los llamados comanditos para la venganza, en alusión a los grupos violentos actuantes que de manera sincrónica comenzaron a operar en todos el país y dentro de sus prioridades estuvieron las de arremeter contra los símbolos. No solo aquellos construidos por la Revolución como escuelas, hospitales, Centros de Diagnóstico Integral, Comité Local de Abastecimiento y Producción, sino también de carácter religioso y profundo arraigo popular como estatuas del beato José Gregorio Hernández, del Cacique de Coromoto y Hugo Chávez. Los llamados comanditos fascistas agredieron varias estatuas del líder bolivariano y lograron tumbar una en el estado de La Guaira (norte), cuyos autores fueron todos detenidos, comunicó el dignatario. Asimismo reveló que el lunes querían asaltar el Cuartel de la Montaña para sacar al comandante Chávez y humillarlo y el pueblo del 23 de enero se lo impidió. Se trata de la típica imagen de las revoluciones de colores impulsadas por los gringos en varios lugares del mundo, afirmó. El jefe de Estado ratificó que “no habrá perdón, habrá justicia”, y aseguró que “esta vez no va haber impunidad, ténganlo por seguro”. Un capítulo reeditado como calco en esta nueva embestida contra un sistema democrático latinoamericano fue la pretensión de dar vida al desacreditado y fenecido Grupo de Lima, esta vez representado por los gobiernos de Argentina, Chile, Costa Rica, Perú, Panamá, República Dominicana y Uruguay. Como expuso la Cancillería bolivariana se sumaron “un grupo de políticos sicarios de ultraderecha especializados en desestabilizar gobiernos en América Latina” como los expresidentes lván Duque, Mauricio Macri, Andrés Pastrana y Oscar Arias, además de los políticos estadounidenses Marco Rubio y Rick Scott. “A Venezuela se le respeta”, declaró el gobernante al ratificar la expulsión de los diplomáticos y la rotura de relaciones con esos siete países. De acuerdo con las informaciones oficiales divulgadas por autoridades pertinentes, hasta ayer 749 personas resultaron detenidas y como dato curioso revelado el 80 por ciento de los detenidos tenía antecedentes penales y el 90 estaban drogados y poseían armas. El saldo lamentable fue dado a conocer por el ministro para la Defensa Vladimir Padrino al reportar 23 militares y 25 policías heridos, además de un sargento de la Guardia Nacional fallecido por un disparo en el cuello, en el estado de Aragua (norte). A modo de contención y como parte de las medidas de prevención anunciadas por el presidente, fue creado un plan de patrullaje interactivo en avenidas, urbanizaciones y comunidades de “estos grupos comanditos violentos”, y otro especial de protección del pueblo barrio adentro.