Por Brendali Reyes
En un partido lleno de emociones y giros inesperados, el Paris Saint-Germain (PSG) se impuso al Liverpool en los octavos de final de la Champions League tras una dramática tanda de penaltis. El encuentro, que terminó 0-1 en el tiempo reglamentario gracias a un gol de Ousmane Dembélé, se decidió desde los once metros, donde el portero Gianluigi Donnarumma se convirtió en el héroe al detener dos lanzamientos y asegurar el pase a cuartos de final.
El partido comenzó con el Liverpool presionando fuerte en Anfield. Mohamed Salah estuvo a punto de abrir el marcador en los primeros minutos, pero Nuno Mendes y el propio Salah fallaron oportunidades claras. Sin embargo, fue el PSG quien se adelantó en el marcador en el minuto 12, gracias a un contragolpe letal. Bradley Barcola centró el balón y Dembélé aprovechó un error de comunicación entre Ibrahima Konaté y el portero Alisson para marcar a puerta vacía. Este gol fue el vigésimo primero de Dembélé en lo que va de 2025, consolidándolo como uno de los goleadores más efectivos del momento.
A pesar del dominio inicial del Liverpool, el PSG demostró ser más peligroso en los contraataques. Donnarumma brilló bajo los palos, deteniendo un potente disparo de Konaté y un mano a mano con Barcola. Por su parte, Alisson también tuvo que intervenir en varias ocasiones para mantener a su equipo con vida, especialmente en un remate de Khvicha Kvaratskhelia que rozó el gol.
En la segunda mitad, el Liverpool redobló sus esfuerzos y estuvo cerca de empatar en varias ocasiones. Trent Alexander-Arnold estrelló un disparo en el poste, y Dominik Szoboszlai vio un gol anulado por fuera de juego de Luis Díaz. El PSG se salvó en varias ocasiones gracias a intervenciones clave de Donnarumma y la defensa, que bloquearon remates de Szoboszlai y Díaz.
El partido se fue a la prórroga, donde el PSG tuvo dos oportunidades claras para sellar la victoria. Un cabezazo de Lucas Beraldo y un latigazo de Désiré Doué rozaron el poste, dejando a los aficionados con el corazón en un hilo. Finalmente, la suerte se decidió desde el punto penal, donde Donnarumma se convirtió en la figura clave al detener dos lanzamientos, asegurando la victoria del PSG.
El entrenador del PSG, Luis Enrique, celebró la clasificación y destacó la importancia de mantener la calma en momentos tan decisivos. Por su parte, el Liverpool, a pesar de su esfuerzo, se quedó fuera de la competición en una noche donde las oportunidades no se materializaron en goles.
Con este triunfo, el PSG avanza a cuartos de final y espera al ganador del duelo entre Aston Villa y Brujas, mientras sigue soñando con levantar su primera Champions League.