Un ataque balístico iraní puso a prueba el sofisticado sistema antiaéreo israelí, dejando varios edificios impactados y heridos civiles*
Por Julio Guzmán Acosta
En una noche de alta tensión, Israel enfrentó un nuevo desafío a su sistema de defensa antiaérea cuando misiles balísticos lanzados desde Irán lograron penetrar parcialmente sus escudos protectores, impactando en algunos puntos de Tel Aviv. Aunque el ejército israelí informó haber interceptado la mayoría de los proyectiles, se confirmaron impactos en edificios de la ciudad y al menos 15 civiles resultaron heridos, atendidos en un hospital local.
Este episodio marca un escalamiento significativo en el conflicto que desde octubre de 2023 azota la región, donde Israel ha sido blanco constante de ataques provenientes de diversos frentes, incluyendo Gaza, Líbano, Siria, Irak, Yemen e Irán. La variedad de proyectiles ha sido amplia, desde cohetes de corto alcance hasta misiles balísticos, drones y cohetes de mediano alcance.
Israel ha desarrollado a lo largo de décadas un complejo sistema de defensa en capas que combina tecnología avanzada y cooperación estrecha con Estados Unidos. Entre los sistemas destacados se encuentran la Flecha, diseñada para interceptar misiles de largo alcance fuera de la atmósfera, y la Honda de David, especializada en neutralizar amenazas de mediano alcance como las que posee Hezbollah en Líbano.
La Cúpula de Hierro, quizá el sistema más conocido, está enfocada en derribar cohetes de corto alcance con una tasa de éxito superior al 90%. Este sistema ha sido protagonista en la defensa contra miles de ataques desde su activación hace más de una década, y ha sido vital durante el actual conflicto.
En paralelo, Israel trabaja en el desarrollo del Rayo de Hierro, un sistema basado en tecnología láser que promete revolucionar la defensa aérea por su bajo costo operativo en comparación con los sistemas tradicionales, cuyo costo por intercepción puede superar los dos millones de dólares. Aunque aún no está operativo, se espera que este avance tecnológico aporte una capacidad defensiva más eficiente y económica.
Este reciente ataque iraní, y su capacidad para vulnerar parcialmente las defensas israelíes, subraya la fragilidad y la complejidad del conflicto en Medio Oriente, y la constante amenaza que representa para la estabilidad regional y global. La escalada bélica no solo pone en peligro a las poblaciones civiles, sino que también tensiona la geopolítica mundial, con repercusiones económicas y humanitarias que trascienden las fronteras de la región.
