Solo la fuerza y movilización popular puede superar al congreso gomígrafo del gobierno y el PRM, y a las propuestas de reformas políticas limitadas y de retroceso que propone el presidente Luis Abinader.
JULIO GUZMÁN ACOSTA
El secretario general del Partido Comunista del Trabajo (PCT), Manuel Salazar, se ha referido a la propuesta de reforma a la constitución que ha presentado el gobierno de Luis Abinader y las califica de limitadas en los asuntos que se sugieren.
En lo referente a la propuesta del gobierno de unificación de las elecciones municipales con las nacionales, el máximo dirigente del PCT las define como un retroceso y que busca perpetuar la influencia de los partidos del sistema, impidiendo un ejercicio en igualdad de las distintas formaciones políticas.
La organización de izquierda dice que, en el congreso actual, “son casi nulas las posibilidades de que se produzcan debates que pudieran dar amplitud y profundidad democrática a las reformas planteadas”.
“Las propuestas de reformas a la constitución se hacen a un congreso con todas las pintas de que se limitaran a corroborar lo que diga el presidente Luis Abinader y solo introducirán a plantear pequeñas enmiendas que correspondan a sus intereses corporativos”.
Salazar enfatiza en su declaración de prensa, “que la mayoría de los congresistas que componen el congreso salido de las urnas en las últimas elecciones, han dependido y dependen del poder del presidente de la República para mantenerse como legisladores y hacer carrera política”, razón por la cual el PCT no espera nada de ese debate que profundice las reformas democráticas que demanda el país.
El máximo dirigente del PCT manifestó “que la preocupación fundamental de la izquierda en el debate sobre la reforma constitucional debe ser la de constituir un vigoroso movimiento de masas en torno a un pliego de propuestas de reformas”.
En su declaración Manuel Salazar insistió en que “solo el vigor de la movilización popular puede disuadir al gobierno y sus congresistas para que entren en un proceso de reformas políticas que supere el régimen conservador actual, cuya reforma realmente democrática y moderna, se espera desde la caída de la dictadura de Trujillo en 1961”.