THIAGO ZORRILLA ACOSTA
Santo Domingo, — En una jornada marcada por la incertidumbre, la Asamblea Nacional Revisora aprobó en primera lectura, y con modificaciones, ocho artículos clave de la Constitución, como parte del proceso de reforma impulsado por la Ley 61-24. La sesión, presidida por Ricardo de los Santos, atrajo la atención de diversas agrupaciones y ciudadanos interesados en el destino jurídico de la carta magna del país.
Al inicio de la sesión, De los Santos estableció un ambiente de seriedad y orden, recordando la metodología de trabajo. “Aquí en el Salón de la Asamblea no tenemos votación electrónica, sin embargo, el artículo 67 del reglamento nos indica que podemos votar manualmente”, explicó, mostrándose confiado en que este método sería “estricto, rápido y sin errores”. Esa información generó confianza en los asambleístas presentes, quienes se prepararon para las votaciones individuales, utilizando rótulos que indicaban su aprobación o rechazo.
Entre los artículos aprobados se destaca el artículo 81, que redefine la composición de la Cámara de Diputados. La propuesta, impulsada por el asambleísta Ramón Bueno, establece que la cámara esté integrada por 170 diputados, de los cuales 158 serán elegidos por circunscripciones territoriales, cinco por acumulación de votos y siete por representación de la comunidad dominicana en el exterior. Este cambio debe impactar económicamente por cuanto se ha reducido la cantidad de diputados en la representación política del país.
Además, se aprobaron los artículos 166 y 167, presentados por Cristóbal Castillo, los cuales hacen énfasis en la regulación de la Administración Pública ante la Jurisdicción Contenciosa Administrativa y definen el rol de la Oficina del Abogado General de la Administración Pública como una dependencia del Poder Ejecutivo. Estas modificaciones son vistas como pasos hacia una mayor transparencia y eficiencia administrativa.
En la misma sesión, el artículo 171, propuesto por Pedro Catrain y Aníbal Díaz, recibió luz verde, lo que establece que el presidente de la República, al inicio de su mandato, propondrá al Consejo Nacional de la Magistratura la designación del Procurador General de la República y siete Procuradores Adjuntos. Este artículo subraya la importancia del equilibrio de poderes y el adecuado funcionamiento del sistema judicial en el país.
Las modificaciones a los artículos 178 y 179 también fueron aprobadas. Estas incorporan nuevas funciones al Consejo Nacional de la Magistratura, quien se encargará de designar al Procurador General y sus adjuntos, un aspecto que ha generado muchas controversias y que debe ser crucial para el fortalecimiento del sistema de justicia dominicano.
Antes de entrar en la votación, la asamblea fue inaugurada con una salva de 21 cañonazos, seguida del Himno Nacional, un gesto que simboliza la solemnidad y la importancia de la ocasión. La pompa y la seriedad del inicio del evento fueron recibidas como un llamado a la responsabilidad y al compromiso por parte de los legisladores.
Con la finalidad de asegurar la cohesión y claridad en las modificaciones, el presidente de la Asamblea también designó dos Comisiones Especiales: una de Estilo, encargada de la redacción de los artículos aprobados, y otra de Auditoría, que se dedicará a verificar la coherencia y la armonía de los cambios realizados con respecto a la Constitución existente.
La Comisión de Estilo está compuesta por asambleístas destacados como Johnson Encarnación y Ginnette Bournigal, quienes tendrán la responsabilidad de pulir el contenido legislativo. Por otro lado, la Comisión de Verificación, que incluye a Ramón Rogelio Genao y Aracelis Villanueva, se encargará de garantizar que las modificaciones no presenten contradicciones.
A medida que la Asamblea Nacional Revisora avanza en este proceso de reforma, la atención del país se centra en los próximos pasos y en cómo estas enmiendas moldearán el futuro político y social de la República Dominicana. La tarea no es simple, pero el compromiso de los asambleístas parece firme en su deseo de modernizar y fortalecer la carta magna que rige las leyes del país. El camino hacia una nueva Constitución está en marcha, y con ello, la esperanza de un futuro más representativo para todos los dominicanos.