Montjuïc vibró con un Barça imparable que, con un doblete de Lewandowski, dejó claro que la Liga es cosa de dos.
Por Thiago Zorrilla Acosta
Barcelona, 30 de marzo 2025. – El FC Barcelona sigue intratable bajo el mando de Hansi Flick. Con una novena victoria consecutiva, esta vez ante el Girona (4-1), los azulgranas afianzaron su liderato en solitario a falta de nueve jornadas. Ni el cansancio, ni los horarios, ni las supuestas «72 horas de descanso» parecen afectar a un equipo que vive su mejor momento de la temporada.
Primer tiempo de dominio absoluto
Desde el pitido inicial, el Barça impuso su juego. La presión alta desactivó al Girona, que apenas logró respirar. Lewandowski probó a Gazzaniga en los primeros compases, mientras Lamine Yamal, incansable, rozó el 1-0 con un regate dentro del área. El portero visitante tuvo que sacar las manos ante un cabezazo de Araujo, pero no pudo hacer nada cuando, en el borde del descanso, un saque de falta de Lamine golpeó el brazo de Krejci y se coló en la red. Un gol con sabor a justicia para un Barça que lo merecía.
Breve reacción gironista y respuesta letal del ‘9’
El Girona salió con otra actitud en la segunda parte y, en su primera llegada clara, Dovbyk aprovechó un error en la salida de balón para empatar con un tiro cruzado. Pero la alegría duró poco. El Barça, lejos de amilanarse, redobló su ataque. Eric García estrelló un remate en el poste, y minutos después, Lewandowski apareció para, con un remate imposible, volver a poner al Barça por delante.
El polaco, en estado de gracia, sentenció el partido con su segundo tanto (25º en Liga), tras una asistencia magistral de Frenkie de Jong, que acababa de entrar. Ferran Torres, en racha pese a sus pocos minutos, puso la guinda con el cuarto gol, mientras Lamine Yamal estuvo a centímetros del quinto, pero su disparo chocó en el travesaño.
Un Barça que no conoce límites
Flick volvió a gestionar bien las rotaciones (descanso para Raphinha, Balde y Cubarsí) y demostró que, incluso sin De Jong desde el inicio, el equipo mantiene una pegada demoledora. El Girona, que el año pasado ganó 2-4 en Montjuïc, esta vez no pudo contra una máquina bien engrasada.
Con este triunfo, el Barça envía un mensaje claro: no piensan soltar el liderato. La Liga se decide entre ellos y el Real Madrid, pero el ritmo de Flick y su escuadra parece imparable. !!La fiesta azulgrana sigue viva!!
