Uno de cada 10 pacientes sufre complicaciones durante la atención sanitaria y más de 3 millones mueren cada año debido a atención insegura. En países de bajos ingresos, hasta 4 de cada 100 mueren por la misma causa.
Por Pedro Ángel
La atención de calidad y con seguridad que se da a los pacientes pasa por varios componentes. No sólo es la auscultación e intervención de los médicos. Son varias cosas.
Asistiendo a eventos nacionales e internacionales he aprendido mucho sobre este tema y, en esencia, aquello de que una asistencia con calidad y seguridad va englobada en el comportamiento general de un personal sanitario y hasta administrativo, y las garantías del centro de salud que ofrece la atención.
Cuando la atención no se ofrece con estos dos componentes, hay problemas. Vienen las complicaciones, las infecciones asociadas a la atención sanitaria, las demandas médicas y los disgustos del usuario contra los médicos y los centros.
Es una sinergia entre todo el que trabaja en clínica u hospitales porque hasta una recepcionista, enfermera o empleado de seguridad que no toque la misma música pautada por la orquesta, se produce una atención sin seguridad y calidad.
En días recientes asistimos al Foro de Calidad y Seguridad Internacional en Salud, organizado por el Centro Médico de Diabetes, Obesidad y Especialidades (CEMDOE), donde afirmé los conocimientos de lo que acabo de hablar.
Y, además, reafirmé la necesidad de que los centros de asistencia en salud tengan las garantías certificadas por instituciones y organizaciones nacionales e internacionales para ofrecer asistencias, consultas, atención, tratamientos y procedimientos con plena seguridad y calidad para minimizar cualquier impacto negativo.
En ese novedoso evento, Gastón Gabin, CEO de CEMDOE e INTEGRA, aseguró que sin seguridad y calidad no hay éxito en la atención de los pacientes y entiende que éstos son el centro de los centros de salud.
Dijo que el ingrediente más importante para lograrlo es la gente y un equipo con propósito y fue enfático al decir que lograr éxito en esos puntos debe ser un modelo para República Dominicana y sus servicios médicos y sanitarios.
Uno de cada 10 pacientes sufre complicaciones durante la atención sanitaria y más de 3 millones mueren cada año debido a atención insegura. En países de bajos ingresos, hasta 4 de cada 100 mueren por la misma causa.
Esto lo dijo David Jaimovich, vicepresidente de la Joint Comission Acredittation, una de las más prestigiosas acreditaciones de servicios de salud.
Tomando los últimos estudios sobre el tema, el experto aseguró que más del 50 por ciento de las complicaciones son prevenibles y la mitad se atribuye a errores de medicación.
Algunas estimaciones sugieren que hasta el 4 de cada 10 sufren complicaciones de entornos primarios y ambulatorios, mientras hasta el 80 por ciento se puede evitar.
Los eventos adversos comunes se pueden evitar y los daños evitables al paciente incluyen errores de medicación, procedimientos quirúrgicos inseguros, infecciones, errores de diagnósticos, caídas de pacientes, úlceras de presión, identificación errónea de pacientes, transfusiones de sangre inseguras y tromboembolia.
República Dominicana debe apuntar a la calidad y seguridad en sus servicios a los pacientes. No debemos transigir en eso. Más ahora que alrededor del 4 por ciento de los turistas que nos visitan lo hacen en procura de atención en salud, según revela el 2do. Estudio de Turismo de Salud y Bienestar desarrollado por la Asociación Dominicana de Turismo de Salud.