“Padre, perdónalos porque no saben lo que hacen”, proclamó Jesús en su martirio; un ejemplo del perdón y la misericordia hacia los demás sin precedente en Lucas 23: 34
La Semana Santa es el conjunto de celebraciones religiosas que se hace la última semana de cuaresma, entre el domingo de ramos y el domingo de resurrección, estas festividades conmemoran los últimos momentos de la vida de Jesús de Nazaret.
La realidad es que en los últimos años esta importante conmemoración religiosa ha sido distorsionada, las personas las han utilizado para hacer del libertinaje, excesos, exabruptos, desorden e ingesta de alcohol sin control en algo común, provocando esto situaciones lamentables que ha llevado el luto a miles de familias dominicanas en toda la geografía nacional.
A pesar de que las autoridades a través del Ministerio de Interior y Policía lanzaron el “Operativo, Semana Santa 2025”, el cual integra a unos 25,548 agentes policiales y 2,400 soldados, 4,577 vehículos para patrullaje, grúas para asistencia y 12 camionetas con sistema de depuración de placas en tiempo real, son muchos los excesos de los ciudadanos en cada rincón del país, haciendo titánica la labor en este operativo, el cual tiene como fin reducir a su más mínima expresión los desastres causados por ciudadanos que han convertido una época de devoción en una semana trágica y de dolor para muchas familias.
Ahora es preciso hacernos varias preguntas con el objetivo de entender, por qué esta semana llamada a ser un rito devocional se ha convertido en un libertinaje colectivo:
¿Qué explica la biblia sobre la Semana Santa?
¿Son estas las fechas correctas para conmemorar los últimos días de Jesús de Nazaret?
¿Existen datos que sitúan la muerte y resurrección de Jesús en esta fecha?
¿Por qué la desobediencia durante esta conmemoración?
Para hacer referencia a nuestra primera interrogante sobre hasta qué punto las personas creen en la Semana Santa es preciso recurrir a algunos datos de la propia biblia, el libro de libros, es una de las piezas más leídas en el mundo. Según la biblia en San Mateo 21: 1-11, el domingo Santo se narra la entrada triunfal de Jesús en Jerusalén.
El jueves Santos está descrito en Lucas 22:7-20, cuando llegó el día de la fiesta de los panes sin levadura, es la fiesta cristiana que abre el “Triduo Pascual”, el periodo durante el cual la liturgia católica conmemora la pasión, muerte y resurrección de Jesucristo, y constituye el momento central de la Semana Santa y del año litúrgico.
El viernes Santos está descrito en la Biblia en Marcos 9:31: 3, porque enseñaba a sus discípulos, y les decía: el hijo del hombre será entregado en manos de hombres, y le matarán, más muerto él, resucitará al tercer día, este día es entonces, la liberación y redención de Israel por parte de Dios de manera sobrenatural, se recuerda el sacrificio del cordero.
En Mateo 27: 62-66, nos da una explicación sobre la conmemoración del sábado Santos, dice: «después de la puesta del sol del sábado, al final del día de reposo, los sumos sacerdotes y fariseos fueron a Poncio Pilato y le pidieron que un guardia se colocara en la tumba de Jesús para evitar que sus discípulos sacaran y llevaran el cuerpo». El sábado santo es la conmemoración de Jesús en el sepulcro y su descenso al abismo.
Ahora es oportuno hacer mención sobre la interrogante de muchos historiadores y estudiosos del origen de la Semana Santa, con relación a si son estas las fechas correctas para conmemorar los últimos días de Jesús de Nazaret. ¿Esta época es ficción o realidad?
Según un artículo publicado por la BBC News en año 2021, esta transición se produjo principalmente gracias a un prolífico escritor de la época, pionero de la Iglesia cristiana y autor de muchos textos que ahora se encuentran en la Biblia: Paulo de Tarso (c. 5-67).
Pablo de Tarso, de nombre judío Saulo de Tarso o Saulo Pablo, y más conocido como san Pablo (Tarso, Cilicia 5-10 d. C.-Roma, 58-67), es llamado el «Apóstol de los gentiles», el «Apóstol de las naciones», o simplemente «el Apóstol».
Tarso fue el fundador de comunidades cristianas, evangelizador en varios de los más importantes centros urbanos del Imperio romano tales como Antioquía, Corinto, Éfeso y Roma, y redactor de algunos de los primeros escritos canónicos cristianos incluyendo el más antiguo conocido, la primera epístola a los tesalonicenses.
Su pensamiento conformó el llamado cristianismo paulino, una de las cuatro corrientes básicas del cristianismo primitivo que terminaron por integrar el canon bíblico, también llamadas epístolas paulinas, la Epístola a los romanos, la primera y la segunda epístola a los corintios, la epístola a los gálatas, la epístola a los filipenses, la primera epístola a los tesalonicenses y la epístola a filemón tienen en Pablo de Tarso su autor prácticamente indiscutible.
Estas epístolas, junto con el libro de los Hechos de los Apóstoles, las fuentes primarias independientes cuyo exhaustivo estudio científico-literario permitió fijar algunas fechas de su vida, establecer una cronología relativamente precisa de su actividad, y una semblanza bastante acabada de su apasionada personalidad.
Sus escritos, de los que han llegado a la actualidad copias tan antiguas como el papiro 46 datados de los años 175-225, fueron aceptados unánimemente por todas las Iglesias cristianas.
Para el historiador Chevitarese, los informes que existen, dan cuenta de los hechos entre la detención de Jesús, en la madrugada del jueves al viernes, y su crucifixión, horas después, no son históricos; son teología. Finalmente, todos los evangelistas acuerdan situar la muerte de Jesús en un viernes, dentro de la festividad de Pascua.
El autor del libro Vita di Gesù Cristo, el sacerdote y arqueólogo bíblico italiano Giuseppe Ricciotti, reunió información histórica y concluyó que lo más probable es que la ejecución se hubiera producido el equivalente al 7 de abril del año 30.
Es importante aclarar que la muerte en la cruz de Jesús, cuyo simbolismo acabó por confundirse con la propia religiosidad cristiana, no era un acontecimiento extraño en esa época. “La crucifixión era la pena de muerte utilizada por los romanos desde el 217 a.C. para los esclavos y todos aquellos que no eran ciudadanos del Imperio”, según el politólogo, historiador especializado en medio oriente y escritor italiano Gerardo Ferrara, de la Pontificia Universidad de la Santa Cruz, en Roma.
La crucifixión era una tortura tan cruel y humillante que no estaba reservada para un ciudadano romano. Ferrara, además puntualizó que la fiesta de Pascua era política, porque es cuando se celebra el paso de la esclavitud a la libertad, la salida del pueblo hebreo de Egipto a la ‘tierra donde fluye la leche y la miel’.
¿Por qué la desobediencia durante esta conmemoración?
Podríamos citar muchas razones del comportamiento errático, libertino y desbordado de la población durante estas festividades cristianas, entre ellas la descomposición social y del principal núcleo de la sociedad, la familia, era en el seno de esta donde se cultivaban, mantenían y se desarrollaban las tradiciones religiosas de Semana Santa muchos años atrás, ejemplo: visita a la iglesia, actividades en donde todos los miembros de la familia, compartían mementos de reflexión propios de la época.
De igual manera en este punto cabe destacar la caída estrepitosa de la iglesia católica y su hegemonía casi absoluta en el seno de las familias, la proliferación de otros grupos religiosos con diferentes doctrinas han permitido que un número importante de las familias cambiarán su forma de actuar y de pensar con relación a la Semana Santa.
Agregar que en este artículo no pretendemos plasmar una verdad absoluta, no, esa no es la intención, con el mismo pretendemos llevar a un contexto reflexivo, el porqué las personas de esta generación han preferido cambiar el rito devocional de la Semana Santa por el libertinaje colectivo.