Por Brendalis Reyes
Ciudad de México, 22 de febrero de 2025. — La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, manifestó hoy su preocupación por la situación del exmandatario peruano Pedro Castillo, quien fue destituido y encarcelado en diciembre de 2022, calificando su caso como una “injusticia”.
Durante una conferencia de prensa, Sheinbaum respondió a preguntas sobre su reunión con el abogado argentino de Castillo, Guido Croxatto, quien busca apoyo internacional para denunciar las violaciones a los derechos humanos del expresidente peruano. La mandataria mexicana señaló que Croxatto enfrenta “muchas dificultades” para acceder a su defendido, a quien se refirió como “el expresidente o presidente, como le queramos llamar”.
Sheinbaum afirmó que Croxatto presentará el caso en diversas instancias internacionales para exponer las irregularidades en el proceso contra Castillo. “Vino a solicitar el apoyo de los embajadores que pudieran estar en estas instancias, dentro del marco de la Constitución de México y nuestras leyes. Le planteamos que, en ese marco, por supuesto que vamos a apoyar. Consideramos que es una injusticia”, declaró.
Pedro Castillo, quien llegó a la presidencia de Perú en 2021 tras ganar las elecciones, fue destituido y arrestado en diciembre de 2022 bajo la acusación de intentar disolver el Congreso, un acto que fue considerado por varios sectores políticos y sociales de la región como un golpe de Estado.
El expresidente mexicano Andrés Manuel López Obrador (2018-2024) también se pronunció en su momento sobre el caso, denunciando que Castillo era víctima de “fascismo, racismo y clasismo” en Perú. Además, destacó que el exmandatario fue destituido de manera forzosa y encarcelado injustamente.
En diciembre de 2022, Lilia Paredes, esposa de Castillo, y sus dos hijos llegaron a México, donde recibieron asilo político. Desde entonces, las relaciones entre México y Perú se han mantenido en un nivel mínimo, limitándose a la presencia de encargados de negocios.
El caso de Pedro Castillo sigue generando controversia internacional, con voces que exigen su liberación y otras que respaldan su destitución. México, bajo el liderazgo de Sheinbaum, ha reiterado su compromiso de apoyar las demandas de justicia dentro del marco legal internacional.